Rob McEwen, empresario canadiense dedicado a la minería, se siente atraído por las medidas libertarias de Javier Milei y se encuentra en la búsqueda de 100 millones de dólares para desarrollar el proyecto de cobre de Calingaste, en San Juan.
El hombre de negocios comenzó a dialogar con dos posibles inversionistas, el fabricante de automóviles Stellantis NV y una empresa perteneciente a Río Tinto, holding canadiense. Durante los próximos seis meses buscarán fondos para llevar a cabo tareas de viabilidad y de ingeniería.
Para McEwen, la llegada de Milei al poder con promesas de liberación de la economía pueden ayudar a hacer prosperar proyectos como el de la mina Los Azules. En su proyecto de Ley Ómnibus, Milei incluyó el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones, que prevé estabilidad fiscal y seguridad jurídica con arbitraje internacional para proyectos con perfil exportador.
No obstante, a pesar de ser recibida con buenos ojos por el mundo empresario, aún persisten temores ante la posibilidad de que un cambio de gobierno, o el empeoramiento de las variables macroeconómicas dificulten el cumplimiento, sobre todo a partir de la experiencia de la Ley de Inversiones Mineras, muy similar al RIGI.
“El desafío para Milei es actuar con rapidez porque los mercados de metales son cíclicos y las ventanas de financiamiento pueden cerrarse rápidamente”, dijo McEwen sobre el presidente argentino.
Si bien Argentina todavía no tiene proyectos de cobre en producción, para el final de la década, coincidiendo con un alza en la demanda del metal, podría comenzar a exportar cobre como hacen Chile y Perú.
De acuerdo a Bloomberg, el propió McEwen insistió en que la aprobación de la Ley Ómnibus en el Congreso de la Nación propiciaría un clima que ayudaría a atraer socios para la inversión.